Tratamiento de la fibrilación auricular. Parte 3.
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Hola amigos, ¿cómo va su día? Espero que increíble. El día de hoy concluyo con el tema de la semana: el tratamiento de la fibrilación auricular. En esta última parte voy a hablarles sobre la cardioversión eléctrica y farmacológica. Saludos.
La cardioversión eléctrica. Consiste en aplicar un choque eléctrico de corriente continua sincronizado con la actividad eléctrica del corazón para restaurar de forma inmediata el ritmo sinusal. El choque detiene los movimientos asincrónicos de la aurícula y permite que el nodo senoauricular vuelva a dirigir la actividad del corazón. Por lo general, la corriente puede aplicarse a través de parches o palas colocadas sobre la pared torácica. El éxito de la cardioversión depende de la densidad de corriente aplicada, por lo que si no se recupera el ritmo sinusal, se puede repetir el procedimiento incrementando la intensidad de la corriente aplicada. La cardioversión debe ser realizada por personal experto, en un medio hospitalario y, al ser un procedimiento doloroso, bajo analgesia y sedación o anestesia general. El tiempo de hospitalización es corto (el necesario para recuperarse de la sedación y un tiempo posterior variable de observación), salvo que otras condiciones del paciente requieran la permanencia en el hospital.
La cardioversión farmacológica. Consiste en la administración, por vía oral o intravenosa, de fármacos antiarrítmicos para suprimir la fibrilación auricular y recuperar el ritmo sinusal del corazón. La cardioversión farmacológica está indicada en pacientes con fibrilación auricular en los que el tratamiento médico no consigue un buen control de la frecuencia ventricular o que persisten sintomáticos a pesar del buen control de la frecuencia cardíaca, en los que la frecuencia cardíaca rápida agrava la cardiopatía preexistente (por ejemplo, la angina o la insuficiencia cardíaca), en los que no toleran los fármacos antiarrítmicos y en los que tienen una alta probabilidad de permanecer en ritmo sinusal. En pacientes con una cardiopatía (insuficiencia cardíaca, infarto agudo de miocardio, crisis hipertensivas) o una broncopatía descompensada, se debe posponer la cardioversión hasta que se normalice la situación clínica.
En la fibrilación auricular, las dos cámaras superiores pequeñas (aurícula) del corazón laten de manera irregular y demasiado rápido. Estas tiemblan en vez de contraerse correctamente. Durante la fibrilación auricular, es posible que alguna sangre no se bombee eficazmente de la aurícula a los ventrículos. La sangre que se quede puede acumularse en la aurícula y formar coágulos sanguíneos.