Sequedad de piel en el adulto mayor. Parte 1.

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Hola amigos, ¿cómo están? Espero que estén muy bien. El día de hoy les tengo preparado un tema muy interesante y además muy frecuente en la población de tercera edad: la sequedad de la piel. En esta primera parte voy a darles una introducción del tema. Espero que esta información les parezca interesante y sea de gran ayuda para ustedes. Saludos.

Para empezar hay que saber que la piel es el órgano más grande del cuerpo humano que nos envuelve y separa del medio ambiente. Está formada por dos capas: una externa, la epidermis y debajo de esta la otra capa la dermis.

Algunas de las funciones de la piel son las que se muestran a continuación:

• Protección. La piel protege al organismo de las condiciones adversas del medio ambiente y constituye una barrera inmunológica que impide la entrada al organismo de virus, bacterias y otros organismos.
• Regulación. Los receptores de la piel detectan los cambios que se producen en el exterior y esto permite que el organismo responda ante los diferentes estímulos del medio ambiente. Evita la pérdida excesiva del calor y por otra parte el sudor favorece la perdida de calor, regulando la temperatura corporal.Mediante el sudor elimina sustancias de desechos.
• Secreta sustancias neesarias para el organismo. Las glándulas sebáceas secretan sustancias grasas que lubrican el pelo, suavizan la piel y forman una delgada capa protectora.

La sequedad de la piel es un problema de la piel (no es necesariamente una enfermedad), que se manifiesta con descamación fina y picor. Si el proceso sigue avanzando, se presenta una descamación más manifiesta y eritema (rojeces).

Por lo general, el problema suele empeorar en temporadas de otoño e invierno. En verano suele presentarse en caso de bañarse frecuentemente en piscinas con mucho cloro (por el efecto irritativo).