Prevención de escaras en las personas de la tercera edad. Parte 2. - Vida Abuelo

Prevención de escaras en las personas de la tercera edad. Parte 2.

– Parte 2 de 3

Hola amigos, ¿cómo están? Espero que muy bien. Seguimos con el tema de la semana. En esta ocasión voy a hablar de la prevención de las escaras. Espero que les parezca interesante y sea útil para ustedes. Saludos.

 

Algunas medidas para prevenir las escaras son las siguientes:

  • Revisarse la piel. Hacerse un chequeo en la piel por lo menos una vez al día es esencial para la prevención. Es importante que el adulto mayor o el cuidador preste mucha atención a cualquier área de la piel que permanezca enrojecida después de cambiar de posición.

 

  • Tener una buena higiene. Un consejo es que al momento de limpiar la piel sea con un trapo o esponja suave para evitar el riesgo de lastimarla. En caso de preferir o necesitar una ducha diaria, debe tomar más precauciones para reducir la irritación y resequedad de la piel. El baño debe tratar de que sea con agua tibia y un jabón suave.

 

  • En caso de que el adulto mayor está en cama, debe cambiar de posición mínimo cada 2 horas.

 

  • Un consejo para disminuir la fricción es asegurarse de que al momento de cambiar posición lo levanten, en vez de que lo jalen. La fricción puede desprender la capa exterior de la piel y dañar los vasos sanguíneos debajo de esta. Existen aparatos especiales que se pueden colocar encima de la cama de hospital para hacer más fácil el cambiarlo de posición.

 

  • Existen colchones especiales que ayudan a prevenir las escaras por contacto.

 

  • En el caso de que la persona no pueda moverse, el cuidador o la enfermera puede colocarle almohadas debajo de sus piernas, de la mitad de la pantorrilla hasta el tobillo. Esto sirve para evitar que los talones toquen la cama.

 

  • La cabecera de la cama debe elevarse muy poco y por corto tiempo, si es necesario debido a su condición de salud y otras restricciones.

 

  • Utilizar almohadas o cojines en forma de cuña para evitar que se rocen sus rodillas y sus tobillos.

 

  • Si la persona se va a acostar de lado, evite que se apoye directamente sobre el hueso de la cadera. También debe tratar de acostarse en una posición en la que el peso y la presión se distribuyan en todo el cuerpo. Las almohadas pueden facilitar esto.

Categorías: Artículos, Blog

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Regístrate al Boletín

NuevosProductos