Hogares del adulto mayor. Parte 1.

'- Parte 1 de 3

Hola amigos, ¿cómo están? El tema de la semana es acerca de los diferentes tipos de hogares que puede tener el adulto mayor. En esta ocasión les voy a dar una introducción acerca de este tema. Espero que les parezca interesante y esta información sea de utilidad para ustedes. Saludos.

 

Muchas ocasiones, a medida que pasa el tiempo y el adulto va creciendo, él y sus familiares se preguntan dónde deben vivir los adultos mayores. Lo ideal es en su hogar, que es su propio domicilio o en su comunidad. Ésta es una gran interrogante que se hace el mundo entero buscando opciones diversas para solucionar la creciente problemática demográfica, que es de gran preocupación en todas las sociedades.

 

El adulto mayor debe, idealmente, permanecer en su propio domicilio, donde ha vivido durante toda su vida. Ya que no hay mejor lugar que su hogar de toda la vida, donde todo le es familiar, ya que su vivienda contiene recuerdos sentimentales y personales, los cuales constituyen su gran todo. La ventaja que tiene que la vivienda sea su propiedad es que la persona mayor va a tener sentido de pertenencia, tan necesaria para elevar la calidad la vida de la persona.

Algunas recomendaciones que se debe tomar en cuenta en caso de tener vivienda propia son:

• Debe ser en planta baja. En caso de vivir en un edificio, este debe de contar con ascensor.
• Que no haya superficies resbalosas o desniveladas. En el caso de los baños que puede estar resbaloso la zona de la regadera, una buena opción es poner tapetes para evitar las caídas o colocar barras asideras en la ducha o cerca del inodoro.
• Que todas las habitaciones tengan buena iluminación.
• Si hay escaleras los pasamanos son elementos muy importantes

 

También existen alternativas, ya que algunas veces los familiares piensan que, para mayor comodidad, las personas mayores deberían estar en instituciones de larga estancia, donde les prestan atención todo el día, sin aparente responsabilidad para los familiares, porque todas sus necesidades básicas son atendidas por estos establecimientos.

 

Suena sencillo pero es una decisión muy difícil de tomar. Algunas de las recomendaciones que el familiar debe tomar en cuenta para esta decisión son las siguientes:

• En primer lugar hay que escuchar la opinión de las personas mayores, valorando su estado emocional.
• Hay que tener en mente el estado de salud del adulto mayor. Valorando sus enfermedades crónicas, grado de dependencia física o cognitiva.
• La disponibilidad que tienen sus familiares, o también depende si la persona de la tercera edad no tiene familiares cercanos o por alguna razón los cuidadores no puedan atenderlos en su propio domicilio.