Dermatitis atópica Parte 2
– Parte 2 de 3
Hola amigos, ¿cómo amanecieron el día de hoy? Espero que muy bien. Continúo con el tema de la semana: la dermatitis atópica. En esta ocasión voy a hablarles acerca de los síntomas más comunes y del diagnóstico de este padecimiento. Espero que esta información sea útil para ustedes y les parezca interesante. Saludos.
* Cuadro clínico
Los signos y síntomas de la dermatitis atópica (eccema) varían ampliamente de una persona a otra y comprenden los siguientes:
- Piel seca
- Picazón, que puede ser grave, especialmente durante la noche
- Manchas de color rojo a marrón grisáceo, especialmente en las manos, los pies, los tobillos, las muñecas, el cuello, la parte superior del pecho, los párpados, la parte interna de los codos y las rodillas, y, en el caso de los bebés, el rostro y el cuero cabelludo
- Pequeñas protuberancias que pueden supurar líquido y formar costras si se las rasca
- Piel engrosada, agrietada y escamosa
- Piel en carne viva, sensible e inflamada por rascarse
Por lo general, la dermatitis atópica comienza antes de los 5 años y puede continuar hasta la adolescencia y la edad adulta. Algunas personas presentan exacerbaciones periódicas que luego desaparecen por un tiempo, incluso por varios años.
Es una enfermedad que tiende a ser crónica: tratándola adecuadamente, los síntomas se pueden mantener bajo control, pero a veces nunca se resuelve por completo.
* Diagnóstico
Evaluación clínica. Se hace una serie de preguntas para sospechar el diagnóstico.
En ocasiones, pruebas para desencadenantes alérgicos con pruebas cutáneas, determinación de niveles de radioalergosorbentes o prueba del parche.
Las pruebas diagnósticas para trastornos respiratorios como asma, rinitis y rinoconjuntivitis, que pueden afectar a la aparición de dermatitis atópica.
El diagnóstico de la dermatitis atópica es clínico.
No se requiere análisis de laboratorio para identificar la dermatitis atópica (eccema).