Cuidado de los pies en el adulto mayor. Parte 1. - Vida Abuelo

Cuidado de los pies en el adulto mayor. Parte 1.

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Hola amigos, ¿cómo les va en su día? Espero que muy bien, ya que hoy voy a empezar con el artículo de la semana. En esta ocasión voy a darles una introducción acerca del cuidado que deben de darle las personas de edad avanzada a sus pies. Espero que esta información sea de gran utilidad para ustedes. Saludos.

 

El pie es una estructura anatómica de 26 huesos, un número mayor de ligamentos que los relacionan, tendones y músculos que conforman su funcionamiento. Su forma arqueada y especialmente articular, les configura entre otras, dos importantes funciones:

  • Absorber y amortiguar las vibraciones y golpes que se producen a cada paso.
  • Activar la circulación sanguínea al comprimirse por el peso del cuerpo y a la vez contraerse al dar el paso.

 

Los pies son acreedores de una especial atención por muchas razones, ya que sostienen la totalidad del peso corporal, permiten la movilidad locomotora, son la base que sostiene el equilibrio de nuestro cuerpo y muchas otras cosas más. Sin embargo, y pese a esa relevancia física, quedan a menudo olvidados y relegados a un segundo plano en lo que a cuidados se refiere.

El pie no envejece en forma separada, sino que se ve naturalmente afectado por el proceso de envejecimiento. Toda su economía se ve involucrada. Podemos encontrar afecciones articulares, musculares, esqueléticas, ortopédicas, metabólicas, vasculares, neuropáticas y dermatológicas que van a producir alteraciones en su funcionamiento.

 

Las afecciones de los pies son importantes, dada la relevancia que éstos tienen para la vida y el mantenimiento de la independencia. Su alteración es fuente de sufrimiento y pone en peligro la independencia funcional y autonomía de la persona mayor.

Los problemas comunes de los pies resultan tanto de ciertas enfermedades, como de años de desgaste, calzado inadecuado, el mal secado al salir de la ducha, cambios tróficos por insuficiencia vascular, mal cuidado de las uñas, déficit sensorial, falta de hidratación, obesidad o por una enfermedad incapacitante.

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