Carnosidad en el ojo Parte 3

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Hola amigos, ¿cómo amanecieron el día de hoy? Espero que muy bien. Con esta parte voy a concluir el artículo de la semana: la carnosidad en el ojo. En esta última sección voy a hablarles acerca del diagnóstico, del tratamiento y la prevención de este padecimiento.  Además les mencionaré algunos productos con los que contamos en vida abuelo que serán de gran ayuda para estos pacientes. Espero que toda la información les haya parecido interesante. Saludos.

 

* Diagnóstico

El diagnóstico de la carnosidad en el ojo es básicamente clínico, requiere de una exploración cuidadosa del paciente y que el médico lo relacione con los factores de riesgo que haya tenido el paciente.

 

* Tratamiento

Para esto se recomienda el uso de lubricantes en forma de gotas, y para toda la vida. En caso de que exista inflamación activa, se utilizará el uso de esteroides de acción débil.

Van a ser candidatos a cirugía los pacientes que:

• El manejo médico no logre controlar los síntomas.
• Tengan astigmatismo. Anomalía o defecto del ojo que consiste en una curvatura irregular de la córnea, lo que provoca que se vean algo deformadas las imágenes y poco claro el contorno de las cosas.
• Cuando la carúncula se encuentra en otra localización del ojo. La carúncula lagrimal es una eminencia de color rojizo situada en el ángulo interno del ojo.
• Que hayan tenido pérdida del pliegue semilunar. Es una membrana que sobresale de la carúncula lagrimal del ojo.

 

* Prevención

Ya que la aparición de la carnosidad en el ojo está relacionada con el sol, se puede prevenir su aparición o crecimiento, si se protege de la luz ultravioleta con:

• Lentes de sol que tengan filtro ultravioleta. Para que sean efectivos contra los rayos ultravioleta, los lentes deben de ser grandes, logrando cubrir toda el ojo y tienen que hacer contacto con la frente.
• Sombrillas.
• Sombreros.

 

 

La carnosidad en el ojo o pterigion crece desde la parte exterior de la córnea hacia el centro y puede causar irritación y alteración en la visión. Cuando invade la zona pupilar se requiere tratamiento quirúrgico. En ocasiones pueden afectar a ambos ojos.