Utilidad de la audiometría Parte 2

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Buenas tardes amigos, ¿cómo va su día? Espero que vaya de maravilla. El día de hoy continúo con el artículo de la semana: la utilidad de la audiometría. En esta ocasión me voy a enfocar específicamente en los usos de este estudio. Espero que esta información sea de gran interés para ustedes. Saludos.

La audiometría nos sirve para lo siguiente:

• Valora intensidad de pérdida (leve, moderada, severa, profunda) y tipo (transmisión, percepción/neurosensorial y mixta).
• La audiometría permite detectar la pérdida de audición y se realiza cuando un paciente tiene problemas auditivos o como parte de un examen rutinario.
• Una audiometría suele determinar si la persona sufre pérdida auditiva neurosensorial (cuando hay daño en los nervios o en la cóclea).
• Puede detectar una pérdida auditiva conductiva (cuando el daño está en el tímpano o en los huesecillos).

La pérdida de audición normalmente es resultado de defectos de nacimiento, infecciones crónicas de oído, exposición a ruidos fuertes de manera regular, daño en el tímpano o en el oído interno, enfermedades del oído interno y/o enfermedades genéticas.

* Grados de pérdida auditiva

• Pérdida auditiva leve: Ningún problema en conversaciones cara a cara, pero comienzan a tener dificultades para entender algunas palabras cuando hay mucho ruido de fondo. Técnicamente hablando, se define como la pérdida de audición entre 26 y 40 dB en las frecuencias del habla.
• Pérdida de audición moderada: En este nivel de pérdida se suele pedir muchas veces al interlocutor que repita sus palabras durante las conversaciones «¿Qué?» «¿Cómo?» tanto en conversaciones cara a cara como por teléfono. Los individuos con este grado de pérdida auditiva no pueden oír sonidos más bajos de 40 a 69 dB.
• Pérdida auditiva severa: Si no puede escuchar lo que le dice la gente sin llevar un audífono, o tiende a confiar en la lectura labial para comprender la conversación, puede tener pérdida de audición severa. Las personas con este grado de pérdida auditiva no pueden escuchar los sonidos más bajos de 70 a 94 dB.
• Pérdida auditiva profunda: Si tiene pérdida auditiva profunda, sólo podrá oír las conversaciones a un volumen muy alto, y aun así le será muy difícil entender sin un audífono o implante coclear. Puede preferir el uso de lenguaje de señas para comunicarse. Las personas con este grado de pérdida auditiva no pueden escuchar los sonidos más bajos de 95 dB.