Neumonía hospitalaria Parte 1

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Hola amigos, ¿cómo va su día? Espero que vaya muy bien, porque hoy voy a hablarles de un tema de gran importancia y muy común en nuestro país: la neumonía hospitalaria. En esta ocasión voy a hablar de los aspectos más importantes de este padecimiento así como sus factores de riesgo. Saludos.

 

La neumonía intrahospitalaria, o también conocida como neumonía nosocomial, es una enfermedad que se presenta  48 horas desde la admisión al hospital en un enfermo o aquella neumonía que se presenta en los 7 días tras el alta hospitalaria.

La neumonía intrahospitalaria es la segunda infección más frecuente que presentan los pacientes hospitalizados.

La neumonía es una infección que causa inflamación en uno o ambos pulmones y que puede ser causada por un virus, una bacteria, un hongo u otros gérmenes. La infección generalmente se adquiere cuando una persona respira aire que contiene los gérmenes.

 

* Factores de riesgo

Algunos factores que se relacionan a este padecimiento son los siguientes:

• Cirugía. Haber tenido una cirugía previa.
• Broncoaspiración. Corresponde a la entrada de material extraño a la vía aérea y pulmones.
• Enfermedades crónicas. EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica), enfermedades pulmonares, enfermedades del sistema nervioso central, enfermedades neuromusculares, diabetes mellitus, insuficiencia renal.
• Inmunosupresión. Que por alguna condición el sistema inmunológico no está funcionando adecuadamente.
• Golpe en la cabeza.
• Tabaco y alcohol.
• Traqueostomía. Es un procedimiento quirúrgico realizado con objeto de crear una abertura dentro de la tráquea, a través de una incisión ejecutada en el cuello, y la inserción de un tubo o cánula para facilitar el paso del aire a los pulmones.
• Nutrición enteral. Es la técnica de aportar nutrientes mediante fórmulas nutricionales definidas directamente al sistema digestivo.
• Sonda nasogástrica. Es una sonda especial que lleva alimentos y medicamentos al estómago a través de la nariz.
• Hospitalización prolongada (5 o más días).
• Tomar antibióticos o esteroides por un largo tiempo.