– Parte 1 de 3
Buenos días amigos, ¿Cómo amanecieron? Espero que muy bien, ya que en esta semana les hablaré de un tema de gran importancia, sobre todo para los adultos mayores: el deterioro cognitivo leve. Voy a empezar con una introducción y les hablaré de sus principales factores de riesgo. Saludos.
Este padecimiento tiene una gran importancia debido a que guarda relación con la edad, y en esta última década ha ido aumentando tanto en su incidencia como en su prevalencia, por el aumento progresivo de la longevidad en la población.
El deterioro cognitivo leve (DCL) pertenece a los síndromes geriátricos. Los síndromes geriátricos son situaciones de enfermedad expresadas por un conjunto de síntomas. Son condiciones de salud multifactoriales, propias del paciente adulto mayor, que ocurren cuando los efectos de la acumulación de deterioros, en múltiples sistemas, tornan a una persona vulnerable ante demandas fisiológicas o fisiopatológicas. Éstos incluyen: fragilidad, sarcopenia, anorexia, delírium, caídas, fatiga, polifarmacia, depresión, demencia y deterioro cognitivo leve.
El deterioro cognitivo leve básicamente se trata de una alteración de la memoria, superior a la correspondiente a la edad y nivel educativo del paciente, pero que no afecta la actividad funcional básica del paciente o con una afectación mínima y en ausencia de criterios de demencia. Algunas veces en consulta general o de geriatría los pacientes mayores acuden por pérdidas de memoria y si no cumplen los criterios de demencia, son diagnosticados como deterioro cognitivo leve.
* Factores de riesgo
Algunos de los factores que pueden predisponer al deterioro cognitivo leve son los que se muestran a continuación:
Es importante recalcar que hay estudios que afirman que al tener un estilo de vida activo, esto es decir, actividad es como leer, pintar, escribir, hacer crucigramas (que mantengan activo la capacidad cognitiva), actividad física y actividades sociales pueden retrasar la aparición del deterioro cognitivo.